CIPRES

HOLA BLOGGEROS!

En el post de hoy voy a hablar sobre el ciprés, que se ha naturalizado en todas las regiones templadas del Hemisferio Norte, con temperaturas y suelos adecuados, los cuales pueden estar creciendo de manera espontánea. Son cultivados sobretodo en África, Sudáfrica y Nueva Zelanda.

Una de las principales propiedades medicinales del ciprés es la capacidad para tratar enfermedades relacionadas con el aparato circulatorio, donde hay problemas de sangrado o inflamación de venas:

• Varices: la capacidad que tiene de protección y desinflamación de venas se utiliza muchas veces para tratar esta patología. Hay que cocer durante 10 minutos dos cucharadas de hojas secas por litro de agua. Lo filtramos y se deja enfriar. Para que sea efectivo tenemos que tomar siete cucharadas diarias.
• Varices en las venas del cordón espermático: además de ser molestas suelen ser en muchos casos dolorosas y se necesita cirugía. Muchas veces la infertilidad masculina se debe a la presencia de estas varices en el escroto que producen infertilidad en los espermatozoides. El proceso de coción es el mismo que el anterior.
• Flebitis: en este caso debemos tomar 20 gotas de un extracto que es fluido y se vende en farmacias.

 Además de esto, también posee propiedades astringentes y hemostáticas ya que los taninos de la planta tienen función cicatrizante y aceleran la curación de heridas. Esta capacidad se puede utilizar en el tratamiento de las siguientes anomalías:

• Hemorroides: los preparados de cipres ayudan a disminuir la inflamación y las molestias desagradables.
• Diarrea: la capacidad astringénte del ciprés se utiliza para combatirla.
• Hemorragias.
• Sangre por la nariz.
• Metrorragia: la capacidad que tiene para detener el sangrado se usa en casos de menstruaciones demasiado abundantes o en desarreglos que surgen con la pérdida de regla.

También se puede utilizar en el exceso de sudoración, acné, sabañones, seborrea..

CONTRAINDICACIONES

De momento no se han descrito efectos secundarios en dosis terapéuticas. Sin embargo, el aceite esencial es irritante cuando se aplica sobre la piel y se han descrito reacciones alérgicas en individuos que son sensibles a este producto. Además, si se usa internamente se tiene que administrar con precaución ya que si se superan las dosis puede resultar tóxico.